Llorar: con las manos abiertas, la piel despellejada, los labios secos, los lagrimales vacíos, el hígado descompuesto, las rodillas fracturadas, los huesos desmoronados, las piernas débiles, el sexo muerto, las ganas desoladas.
Estar acá y estar allá, más allá de las palabras y más acá del dolor, a sólo cinco centímetros del último escalón, a veinte metros de la parada final, y la parada final ya es hoy, acá, ahora, ya, presente perfecto, presente imperfecto, presente desamparado.
Por la ventana entran fragmentos de desierto, la tierra seca llena mis ojos, mis ojos no ven nada, con las manos alcanzo las paredes y por las paredes repto hacia la puerta. La puerta pierde su consistencia, se abre como una bocanada de viento salvaje, me deslizo entre sus fauces y caigo muerta del otro lado. Sólo desierto. Agua muerta, o agua putrefacta, que es peor.
Estar acá y estar allá, desaparecer por los días breves y las noches inmensas, el mar aparece en el horizonte pero es demasiado pequeño, el mar es pequeño, el mar por dentro, mi mar por dentro, y una luna tremenda sobre ese mar por dentro.
Nos hemos comido todo, hemos devorado los días y las noches, no queda nada en el camino, llantos apenados y lágrimas pérdidas, no queda nada en el camino, las puertas son salvajes y devoran los caminos, el mar se asoma, pequeño, indefectible, irreversible, inmenso, inmenso al fin. El mar se asoma.
Estar acá y estar allá, más allá de las palabras y más acá del dolor, a sólo cinco centímetros del último escalón, a veinte metros de la parada final, y la parada final ya es hoy, acá, ahora, ya, presente perfecto, presente imperfecto, presente desamparado.
Por la ventana entran fragmentos de desierto, la tierra seca llena mis ojos, mis ojos no ven nada, con las manos alcanzo las paredes y por las paredes repto hacia la puerta. La puerta pierde su consistencia, se abre como una bocanada de viento salvaje, me deslizo entre sus fauces y caigo muerta del otro lado. Sólo desierto. Agua muerta, o agua putrefacta, que es peor.
Estar acá y estar allá, desaparecer por los días breves y las noches inmensas, el mar aparece en el horizonte pero es demasiado pequeño, el mar es pequeño, el mar por dentro, mi mar por dentro, y una luna tremenda sobre ese mar por dentro.
Nos hemos comido todo, hemos devorado los días y las noches, no queda nada en el camino, llantos apenados y lágrimas pérdidas, no queda nada en el camino, las puertas son salvajes y devoran los caminos, el mar se asoma, pequeño, indefectible, irreversible, inmenso, inmenso al fin. El mar se asoma.
Por fin, el mar se asoma, y tiene el color de las palabras mías.